volviendo al colegio ~Libreee~

Había estado dando una vuelta por los alrededores, para despejarme un poco después de toda una mañana de trabajo. A veces resultaba verdaderamente irritante tener que soportar a una pandilla de adolescentes con exceso de hormonas y carencia de neuronas, pero era un trabajo bien pagado. Sí, podría decirse que eso era lo que me repetía continuamente a mi mismo para no desesperarme dentro de un aula.

Mantener la calma siempre es crucial para que los chavales no se te coman vivo. Si les haces más caso del que deben, si les haces ver que son "especiales" y "particulares" entonces se te suben a la chepa. En mi opinión, la clave están en demostrarles que todos son un cero a la izquierda. Ni más, ni menos, simple mediocridad.

Llegué al vestíbulo con las manos metidas en los bolsillos de mis pantalones. Bostecé ligeramente y me senté en las escaleras. Saqué mi teléfono móvil y comencé a revisar llamadas. Lo había tenido toda la mañana en silencio y tenía el maldito buzón de voz lleno.