Si me salto las normas, me las salto bien. [Britney] [+18]

Serían las doce de la noche. No había nadie por los pasillos, ni en las aulas, ni por los alrededores.
A excepción de mí, que caminaba por los pasillos con mi mochila. Acabé por llegar a una de las aulas, y abrí la puerta. Era el aula donde enseñaban filosofía.
Después, me senté en la mesa del profesor, poniendo mi mochila sobre la mesa y abriéndola. ¿Qué qué habría dentro?. Desde luego, libros no, tampoco libretas ni apuntes. Sino una botella de Absenta que uno de mis antiguos amigos me regaló. La cual guardaba para alguna ocasión especial. Y, esta lo era, ¿no?. La primera vez que me saltaría las reglas en la escuela.

Desenrosqué el tapón y la mire unos segundos. ¿Estás seguro?, ¿Sabes las consecuencias, no?... Pensó, dirigiéndome a mí mismo. Maldita sea, ¿Ahora también tenía conciencia?. Sonreí de lado, pero acabé por llevarme la botella a la boca y tomar un primer trago. Estaba asquerosa.

Saboreé la bebida. ¿Sabía a .... anís?. Supiese a lo que supiese, estaba completamente asqueroso. Pero eso no impidió que tomase otro trago. Después, dejé la botella sobre la mesa. Genial, ya comenzaba a sentirme raro. Dios, esto si que sube rápido... Pensé.
Tomé la botella de nuevo y bebí otro trago. Comenzaba a marearme y a sentir un extraño sofoco.
Comencé a recordar cosas, cosas tontas que me habían ocurrido. Como la vez que le bajaron los pantalones en medio de una clase a Dann o la vez que robamos uno de los coches de mi padre y acabamos por hundirlo en el mar. Ahora, no podía parar de reír. Pero conseguí parar al ver a una chica entrando. Con la falda super corta y una camisa con la que enseñaba casi todo.
La chica se dirigió a mí, diciéndome su nombre. ¿Debería presentarme yo también?. Seguramente sí. Y, sin saber por qué, acabé riendo de nuevo.

- Yo soy Sam -Le dije finalmente, con algo de dificultad.-

No pude evitar romper a reír. Me habían dicho muchas cosas sobre mi nombre pero eso, eso era nuevo. Estaba bien que alguien innovase.
- Beber...simplemente beber. ¿Y tú?
Hablé con la misma dificultad anterior. Me restregué levemente las manos por los ojos al ver que mi vista se nublaba un poco. Tomé otro trago.
Reí de nuevo cuando ella comentó lo blando que era. La miré.
- Gracias... tu tambien tienes.. -Le lancé una mirada indiscreta, de arriba a abajo. Solo pude dejar escapar una exclamación al verla detenidamente.- ¡Uau!
No sabía por qué, tal vez sería por el alcohol pero la chica me resultaba bastante atractiva.

¿Un florero?. No pude evitar reír. ¿Por qué el alcohol me tenía que hacer reír sin parar?. Después tomé la botella y se la mostré.
- No es un florero es Absenta y es mi mejor amiga en estos momentos.
Tras el comentario reí de nuevo, entrecerré los ojos y tomé otro trago del licor. Pero este era un trago mayor, más largo. ¿No te estás pasando, Sam?... Pensé. Pero en aquellos momentos a lo que menos caso hacía era a mi maldita mente.
Después pude sentir a Britney acercarse. ¿Uau era bueno?. Sí que lo era y bastante. Iba a contestarle, pero ella cayó sobre mí, convocándome de nuevo, que rompiese a reír.

La vi sonreír, parecía tener una bonita sonrisa. Después intenté levantarme de algún modo. Pero había perdido coordinación por culpa de el alcohol y acabé cayendo con ella encima de nuevo.
Probablemente si lo volviese a intentar acabarían cayéndose por... la ventana. Sí, seguramente acabase por ocurrir eso.
- Me parece que nos quedaremos aquí, en el suelo, un buen rato. -Reí de nuevo, y acabé por señalar a la botella, o a lo que creía que era la botella. Estaba tan borracho que no sabía ni a donde apuntaba.- ¡Y toda la culpa la tiene ella!

Agarré la botella por el cuello y me la puse sobre el pecho. Mirándola como si se tratase de mi peor enemigo. Y, en cierto modo lo era.
- ¡Tu estás loca si piensas que me voy a disculpar contigo!... -Le dije a mi compañera la botella, con bastante dificultad.- Ahora verás...¡Vas a morir!
Dije una vez más, refiriéndome a la botella. Me la acerqué a la boca y bebí de ella. Aunque no bebí ni la mitad de lo acabó por caer en mi camisa, poniéndome empapado del licor. Maldito alcohol y maldita perdida de coordinación.
- ¡Oh, dios. Mira lo que hizo!

¿El Karma? Me sonaba de haberlo escuchado en alguna serie de televisión o algo por el estilo.
No pude evitar reir como estúpido ante su siguiente comentario.
- ¿Como puede la orina subir? ¿Esque tiene patas o algo? -Volví a reír.- Y tranquila, dudo que mi padre se entere, nunca lo hace.
Tenía la vista un poco más borrosa y me sentía bastante mareado, aunque eso no empedía que siguiera riendo, sobretodo al sentir el tacto de su dedo.
- Me haces cosquillas..

No pude evitar volver a reír como un estúpido tras su siguiente comentario. Esto de el alcohol hacía ver divertida cualquier cosa. Hice un gesto con la mano, como solían hacer en las películas. En un intento ridículo de 'llamar al agua'. Reí de nuevo al ver que no funcionaba.
Sentí que metía su mano por debajo de mi camisa, asique volví la vista a ella.
- Si que lo soy. Y mucho.
Reí levemente, seguramente después me acabaría arrepintiendo.

Intenté aguantar las cosquillas como pude. Pero era algo inevitable. ¿Quién no se ríe con ellas?.
comencé al reír de nuevo. Si ya me reía sin las cosquillas, con ellas ya era una locura. ¿Por qué todo era tan exagerado bajo los efectos del alcohol?.
Continué riendo durante un poco más, aunque mis pulmones reclamaban aire ya. Intenté moverme un poco, para deshacerme de las cosquillas, pero era imposible.
- ¡Para, para! - conseguí decir, entre risas.-

Suspiré aliviado al ver que se detenía con las cosquillas. Definitivamente no las soportaba.
La miré cuando dijo que no se sentía bien. ¿Qué era lo que había tomado? Bah, no me acordaba. Aunque también dudaba entre si me lo había dicho o no.
Entrecerré los ojos.
- Voy a dejar de beber... - Si claro.. No te lo crees ni tu, Sam.... Pensé-
Lo cierto es que me sorprendió que todavía no hubiese vomitado. De momento parecía tener buen aguante.

Reí sin muchas ganas
-Si tu lo dices... Hagamos algo divertido que me duermo -abrí los ojos algo lento-Eso sí, tu eliges, no soy muy divertida que digamos
Puse me codo en el piso y sostuve mi cabeza con una mano
Vi la botella
-¿Eso no se vació cuando se te cayó encima?-pregunté con la frente arrugada

Sonreí de una forma algo tonta. ¿Algo divertido?. Esa clase de proposiciones eran algo peligrosas para él. sobretodo en ese estado de inconsciencia. Asique sin pensarlo me levanté del suelo, acercándome a ella y, finalmente poniéndome sobre ella.
- Bueno, yo no quiero que te duermas...
Sonreí una vez más. Y acabé por agarrar la botella. Seguía a la mitad. Asique tomé un trago y, se la pasé.
- Podemos acabar con ella juntos.

Reí levemente. Aunque tenía razón. Personalmente era la peor bebida que había tomado en mi vida. Pero aun así seguía bebiendo de ella. ¿Debería de preocuparme? Quien sabe...
- Lo que está es asquerosa.
Reí una vez más, tomando otro trago de la botella y, después, dejándola a un lado. Ahora venía la parte de la diversión. ¿No?. Sonreí de una forma rara y acabé por acercarme más a ella. ¿Espera, no se supone que a ti te gustan los chicos?... Pensé, aunque una vez más, no le hice caso a mi conciencia. Aunque, era algo normal, ni siquiera sabía que estaba haciendo.
Luego, me acerqué un poco más hasta besarla.

Al ver que se dejaba llevar, puse mi mano sobre su nuca, para profundizar el beso. Después de un poco me separé y bajé hasta su cuello, comenzando a darle pequeños besos, combinados con lamidas.
¿Cuándo fue la ultima vez que hice algo así con una chica? Ah, sí. Los primeros años de secundaria. Creo que fue con...Oh, venga ya, ¿en momentos así me iba a parar a pensar en eso?.
Luego acabé por meterle la mano por debajo de la camisa. Tenía una piel bastante suave. Mientras continuaba con su cuello, me gustaba dejar marcas en los cuellos de las personas con las que estaba. Aunque, en ese estado no se si lo conseguiría.